Hablemos de recuerdos

       HABLEMOS DE RECUERDOS

Hace algunos siglos yo vivía en un pueblo en el que teníamos, salvo de comer, de todo. teníamos Tonto, Borracho Sereno, Grifota, y Barrendero.
AI Barrendero los niños e quitamos las ganas de meterse en el cine a dormir, y que con sus fuertes ronquidos no nos dejara ver la película. Un día cuando plácidamente dormía, lo amarramos al banco y reuniendo un montón de papeles debajo de las piernas, y le prendimos ruego. Salió del cine arrastrando el banco con el, y ya no volvió mas.
AI Grifota que nos apestaba el cine con el humo de su Grifa, le pusimos picadura el Celtas en la cachimba. Murió de sobredosis en el mismo cine, aunque nadie le hizo caso porque daban una de romanos, y con el escándalo de la guerra nadie se dio cuenta que pataleaba y se agarraba la garganta.
Al Borracho, cansado de que siempre se nos meara y vomitara en el paseo, en el sitio de cerca del banco donde nos reuníamos, le pusimos guindillas de maceta en la botella de vino que escondía detrás del kiosco , y cuando casi se la bebió de un trago, se fue poniendo rojo, y daba boqueadas pidiendo agua. Lo llevamos a rastras a la fuente, pero no llegó, se cayó, pegó un brinco, tembló y se quedó quieto, y allí se quedó para siempre.
Al Sereno le descubrimos un rollo que tenia con una viuda, y a cuya casa se metía cuando era muy tarde. La señal para que ella le abriera la puerta, eran dos golpes de chuzo en la acera. Nosotros agarramos una noche un palo e hicimos lo mismo y esperamos, y cuando la viuda abrió muy sigilosamente la puerta y nos vio revolcándonos de risa, ya no salió de su casa en tres meses, y cuando lo hacia, si nos veía salía corriendo.
El Tonto que estaba majareta y que le entraban ataques cuando se le gritaba "Pepe Cabra " y salía corriendo a pegamos, pero como siempre tenia mucha hambre, le cantábamos una canción que hablaba de bocadillos, de cafés con leche, de ensaimadas, entonces se le hacia la boca agua y se quedaba manso y tranquilo, hasta que iba uno y le gritaba de nuevo en la oreja ¡¡Pepe Cabra!! Y a correr de nuevo.

 Recuerdos que no se olvidan.

Pero qué barbaridades hacíais; y ahora os quejáis por un botellón.

Tomb escribió:Pero qué barbaridades hacíais; y ahora os quejáis por un botellón.

¡¡¡¡jajajajaja hombreee, bueno mujeeerrr es que no había tele, ni juegos, ni Internet, solo la playa, en verano, los tebeos, el cine y jugar al balón que no era balón era un pelota de trapos. Eso fue hace muchos siglos y éramos más primitivos que ahora.

Saludos