¿Hay quién entienda al PP?

El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, ha querido dejar claro que el sistema de financiación singular pactado con Esquerra Republicana de Catalunya para la investidura de Salvador Illa no sale del régimen común de financiación, es decir, que no es un concierto económico. Ha afirmado que el modelo es el mismo “para todos los territorios”. Así se ha pronunciado en la reunión interparlamentaria del grupo socialista en el Congreso español.

“Ha habido mucho debate en la conversación publicada, pero nuestro modelo de financiación autonómica es el mismo en todos los territorios. Es blindar los pilares del estado del bienestar que están en manos de las comunidades autónomas atendiendo las particularidades de estos territorios”, ha dicho.

En julio, el presidente español ya situó la financiación singular para Catalunya, pactado en el preacuerdo con ERC, dentro del régimen común. Respondiendo a la pregunta sobre si ofrecería este modelo a las demás comunidades autónomas, dijo que era una negociación bilateral que se abriría con la Generalitat de Catalunya, pero recordó que correspondía en un espacio multilateral. “Pero que efectivamente damos un paso en la federalización de nuestro sistema autonómico, esto es incuestionable”, aseguró.

Así defendió su definición de financiación singular: “¿Financiación singular? Está claro, como también existe en las Islas Baleares, que tienen un régimen especial. Tenemos que negociar bilateralmente con las comunidades autónomas, y después también multilateralmente.”

Negarse a ello por parte de las comunidades gobernadas por el Partido Popular, por el fracaso de su líder, señor Feijóo, de no alcanzar la Moncloa porque sus números en apoyos no daba, habrá que ver cómo sus barones lo explican a sus respectivos ciudadanos. Lo mismo que conseguirá Catalunya, se viene reclamando desde el País Valencià, incluso cuando lo gobernaba el tripartito de izquierdas, si ahora que se le ofrece no lo acepta porque Feijóo lo ordena, ¿qué le dirán a los ciudadanos?

Si el señor Feijóo se volviera a su Galicia tal, a recrearse en los paseos con sus amigo el narcotraficante mientras se deleitan con las estupendas almejas gallegas, no habría en España tanto conflicto. La desesperación de no gobernar España, le lleva a estas absurdas posturas, de que sus barones no hablen con Sánchez sobre las financiaciones que se les ofrece siendo más justas ¿habrá mayor tontería? Cada vez me convenzo más de que este señor no está preparado para gobernar el Estado.

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